El mercado asegurador se ha vuelto un entorno hiper competido, no sólo entre los jugadores tradicionales del sector, sino con la irrupción de otras compañías que se han aventurado a la venta de seguros como un side business. Los usuarios, por otro lado, están ávidos de productos personalizados a sus necesidades, flexibles y que impliquen el menor gasto de tiempo y papel para su contratación. 

En un mercado con esas características, aún existen compañías de seguros que carecen de procesos eficientes y eficaces respecto del almacenamiento y procesamiento de información, no solo para facilitar los procesos a sus clientes sino también para generar reportes oficiales, realizar el análisis de negocio y su rentabilidad.

Generalmente las distintas áreas de la compañía cuentan con sistemas de información y procesos de análisis instalados en las computadoras individuales de los empleados, lo que genera gran cantidad de información que no se encuentra estructurada y almacenada en una sola base, ocasionando riesgos operativos y financieros, así como diferencias en resultados reportados. Es común escuchar que los resultados o la información de la otra área no son correctos. 

En un escenario como este, la tecnología juega un papel preponderante en la solución. Recientemente, se ha adoptado la digitalización de la firma del cliente en pólizas de seguros, pero aún hay mucho tramo por recorrer en el uso de la tecnología para la industria, de forma que se privilegie la experiencia del cliente y se reduzcan los costos operativos del negocio. 

Hoy, la industria de seguros debe echar mano de la digitalización de procesos que le brinden agilidad en la operación, permitiendo al equipo generar mayor valor al tiempo que cumple con las expectativas del cliente. 

La transformación digital de la compañía de seguros también permitirá detectar tendencias en el mercado que puedan representar nuevas oportunidades de negocio o cambios disruptivos de los cuales pueda generar valor, anticiparse a las necesidades y mejorar la experiencia del cliente, ganando con ello la delantera en la competencia.